En su recorrido por Iberoamérica como ilustrador etnográfico, el pintor alemán Juan Mauricio Rugendas conoce en Chile en 1834, a una singular mujer: Carmen Arriagada. Una aristócrata de Talca, casada con su amigo Eduardo Gutike con la que cultivará por más de diez años una relación sin esperanzas, alimentada por una profusión de cartas y esporádicos encuentros. En una aburrida y conservadora Talca de 1845, Carmen y Eduardo son nuevamente visitados por Rugendas. Carmen se verá atormentada entre lealtades, las rígidas costumbres de la época y su consumidora pasión hacia el pintor. Basada en hechos reales, la historia tras estre triángulo amoroso permite recordar a quien es considerada una pionera entre las escritoras chilenas.